Ya lo dijo la gran Teresa Parodi: "la canción es urgente. Es un río creciendo…". En ese mismo río que crece, viene el canto que crece. La palabra con compromiso y la unión con la música popular hacen el caudal. Un torrente de belleza y calidad humana y artística, llegó desde el Tucumán adentro a la ciudad de Buenos Aires, para reinvindicar una de las propuestas más sólidas de los últimos tiempos: el dúo La Yunta, integrado por Julián Humarán y Gustavo Páez en guitarras y voces, acompañados por la percusión de Marcelo Páez y el bajo de Leo Villagra.El sábado 13 de setiembre en La Trastienda de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, a sala llena, se disfrutaron casi dos horas de música popular argentina y latinoamericana, con variaciones escénicas: a dos voces y dos guitarras, a dos voces acompañadas magistralmente por el Topo Encinar en piano y en otros momentos con la banda completa. Dalila Valdéz y Ramón Salinas ilustraron la presentación con la danza. Ariel Lobo fue otro de los invitados para acompañar a Julián y a Gustavo desde la percusión.
El fuego necesario de autores como Atahualpa Yupanqui, Hermanos Nuñez, Néstor Soria, Rubén Cruz, Pablo Mema, sumados al recuerdo de uno de los autores fundamentales del norte argentino: Rolando "Chivo" Valladares, que falleció un día antes de la presentación del dúo tucumano en Buenos Aires. "Lejos" la vidala del Chivo, sirvió para homenajearlo y recordar el talento del hombre que dejó para siempre joyas en el cancionero de la música tucumana (y nacional) tanto el letras como en músicas.
"Caminos llenos de magia", pintó Yuca Córdoba en letra y música y la guardó para siempre en una chacarera: "Tucumán Adentro", la misma que da nombre al segundo material discográfico de La Yunta (DBN Discos). Un disco que en chacareras, gatos, zambas, huaynos, valses, cuecas, escondidos y vidalas, narra la historia de la provincia que enamoró a Atahualpa Yupanqui, inspiró al Chango Rodríguez para cantarle a las carretas cañeras de Simoca y el mismo Jardín de la República al que don Virgilio Carmona le dedicó para siempre bellos versos.
El dúo agradeció especialmente "A Dios (sin máquina que lo iguale)", "A nuestras familias", "A Tucumán" y a "los amigos de siempre y los que vendrán". La producción estuvo a cargo de Marcelo Páez, Jorge Nacer, Catalina Rubinestein, el excelente sonido estuvo operado por Darío Herrera y la muy buena puesta de luces estuvo a cargo de Sergio Layafa. Y la coordinación exacta estuvo a cargo de María Elvira Grillo.
La Yunta (Julián Huamarán y Gustavo Páez) con el Topo Encinar en piano
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