Elpídio Herrera, inventor de la sachaguitarra

Elpídio Herrera es un autor y compositor nacido en Atamishqui, en la Provincia de Santiago del Estero, pero este músico es además un Luthier, es el creador de la “sachaguitarra” y también es uno de los máximos exponentes de la música folklórica sachera (del monte).

Elpídio Herrera nació en el Departamento de Villa Atamishqui, en el corazón del monte santiagueño, su padre era carpintero y él aprendió el oficio, de su niñez recuerda lo que le contaba su padre y se puso a imaginar otra forma de hacer música y representar a su pueblo. "La primera vez que fabriqué una guitarra fue cuando me acordé de aquello que contaba mi padre cuando los mayores usaban la caspiguitarra (guitarra de palo). Encordaban una madera y con eso cantaban las chacareras de mi pago. Era la manera de expresar sus cosas porque no tenían posibilidades de comprarse un instrumento", contó Elpídio en una entrevista a La Nación.
Su formación se completó con un secundario técnico y un viaje de estudios a Buenos Aires. Gracias a sus estudios técnicos (física y química), sumado a sus conocimientos de carpintería, dio origen a una increíble creación: La Sachaguitarra, fabricada con una simple tabla de algarrobo o una calabaza, un corto diapasón, clavos, alambre, cuerdas metálicas y un clavijero metálico, que conforman un instrumento que reproduce sonidos tales como los de guitarra, violín, charango, sikus, todos instrumentos bien “sacheros”.
Junto con Don Sixto Palavecino es uno de los máximos exponentes de la música sachera y con su conjunto “Elpídio Herrera y sus Sachaguitarras Atamishqueñas”, conformado por Elpidio y Manuel Herrera, Nelson Ledesma y la participación estable de Ramiro Herrera, recorrieron varios lugares del mundo llevando la expresión más popular de su pueblo, en Alemania causó una gran impresión el mismo comentó: “Hace un tiempo nos invitaron a tocar en Alemania. Lo que allí querían ver era cómo se toca en el monte. No le vayas con otra cosa porque ellos han inventado la música. Tocale lo tuyo, lo que representás. Así lo hago siempre cuando salgo de mí Atamishqui. No llevo otro perfume que no sea el nuestro. Nosotros hacemos esas chacareras de mi pago que hablan de los personajes de mi zona, de lo cotidiano, las fiestas campesinas a caballo y esas vidalas dedicadas al romance y al recuerdo de los amigos."